[Orellana. Ecuador] “Esta tierra la queremos sana porque vamos a producir sano” y cuando hablamos de hidrocarburos hablamos de cosas graves, mencionaron en la Precumbre agraria y solidaria realizada en Orellana el pasado sábado 25 de junio en el auditorio de Alejandro Lavaka en la ciudad de El Coca.
“Orellana ha sido un territorio industrial importante aunque ahora el petróleo esté de picada. La gente dedicada más a la venta de mano de obra se olvidó de la recolección, de la siembra.” Reconoció la compañera Rosa Alvarado. Sin embargo ”Ahora en estos momentos no hay recurso, trabajo ni dinero para comprar alimento y por ello se ha regresado un poco más al campo. Es ahí donde los proyectos se generan con fuerza.” Recalcó. El petróleo no es amigo, no es vecino… te contamina, te mata. ¿cómo nos despetrolizamos? Se preguntaron entre los compañeros y compañeras.
Con representantes y dirigentes de diversas organizaciones de la Amazonía, se dialogó y puntualizó que como productores campesinos y recolectores se tienen necesidades que no se han resuelto en este territorio. La Coordinadora Ecuatoriana de Agroecología [CEA] interesada en la transformación del campo, se ha sumado a diversas acciones para realizar este Primer Encuentro Nacional y la Pre-Cumbre en Orellana fue una de ellas.
Mercados, producción de alimentos, contaminación de tierra y agua por la extracción petrolera así como la imposición de una ley de tierra que no apunta a resolver las necesidades directas de los campesinos y producción sana fueron parte de las realidades a llevar al primer encuentro de la cumbre agraria en Quito el 21 y 22 de julio de este año.
“La Ley de tierras rurales y territorios ancestrales, ve a la tierra no como la vemos en los campesinos e indígenas sino como un factor de producción” señalaron al describir que en sus hectáreas no sólo producen sino también protegen la biodiversidad de la zona para las siguientes generaciones pero eso la ley lo ve como tierra ociosa. “No somos ociosos, sino defendemos la soberanía alimentaria” declaró Diócles Zambrano.
Entre otros conflictos, el descontento por cierre de escuelas rurales existe, ya que el proyecto del Estado con las Escuelas del Milenio sólo genera abandono de las poblaciones del campo, por no lograr pagar el trasporte necesario para la educación de sus hijos que se ha impuesto a una larga distancia de sus hogares.El esquema de ciudad se ha trasladado al campo y esto no puede solucionar nuestras necesidades, señalaron los asistentes; tanto en el tema de educación como en salud y como ejemplo muy claro Rosa Alvarado menciona que como campesinos, las opciones de salud desde el gobierno no funcionan. “En vez de bailoterapia deberían darnos terapias de descanso, relajación porque pasamos todo el día moviéndonos. Nos deberían apoyar en otro sentido.”
Enfocando el tema agrario, “Queremos que se reconozca el valor agregado de nuestros productos sin químicos, que las reuniones para dialogar sobre leyes, normativas sean con nuestras necesidades campesinas y no con la imposición capitalista de las empresas.
Entre la comunidad queremos resolver la relación de los jóvenes en el campo que se involucren más, reorientar la educación desde las familias. Sobre la actual ley de tierras llamada oficialmente Ley de tierras y territorios ancestrales aunque no la conozcamos esta ahí y nos la van a aplicar. Una propuesta es revisar la ley y saber que el reglamento de la autoridad no se dispare porque no sabemos cómo lo hará. Tenemos que ir conociendo la ley. No podemos leer todita porque tiene montonal de artículos sino que cada uno de nosotros lo hagamos para hacer fuerza y ver que artículos de esta ley se deben cambiar para beneficio nuestro…”
Después de una mañana de reflexión, al terminar de almorzar se acordaron tareas para gestionar la presencia de una delegación de Orellana al primer encuentro de la Cumbre Agraria. “Las inquietudes de aquí serán planteadas allá, en este espacio para acordar a nivel nacional las acciones sobre nuestras realidades” se concluyó en esta PreCumbre.
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